En la barra de direcciones del navegador, ¿Has notado http:// o https:// al principio de las URL del sitio web? Es posible que los usuarios ocasionales de Internet no se den cuenta ni presten atención a esto, pero es importante que un sitio web comience con http:// o https://, especialmente cuando se ingresa información personal en un sitio web.
En esta era de amenazas cibernéticas, violaciones de datos e incertidumbre en línea, los consumidores están perdiendo la confianza; sin embargo, afortunadamente hay maneras de asegurar a los consumidores que están tomando las precauciones necesarias para mantener sus datos seguros y protegidos. Una de las mejores maneras de infundir confianza a sus clientes es cambiando su sitio web HTTP a HTTPS.
El Protocolo de Transferencia de Hipertexto, o HTTP, es una estructura para transferir y recibir información en la web. El problema con el HTTP es que los datos se transfieren como texto plano, lo que significa que cualquiera que intente interceptar este intercambio de datos entre el navegador y el servidor puede leer los datos con relativa facilidad. Por otro lado, el Protocolo de Transferencia de Hipertexto Seguro, o HTTPS, es una versión más avanzada y segura de HTTP y encripta este intercambio de datos con un certificado SSL. El uso de un certificado SSL le dice a los visitantes que su sitio web fue verificado y que su información está siendo manejada de manera segura.
Las ventajas de HTTPS sólo van a aumentar con el tiempo y tener un sitio seguro ahora le permitirá adelantarse a la curva y a su competencia. A medida que las brechas de datos y los ciberataques continúan aumentando, tener un sitio seguro seguirá siendo cada vez más importante.
Según un estudio del Consejo de Seguridad de CA, sólo el 2% de los clientes pasan las advertencias de «No es seguro» en una conexión HTTP. Esto significa que es probable que pierdan una cantidad significativa de tráfico del sitio, simplemente por el hecho de que la conexión a su sitio sea o no segura.
